...Porque siempre hay un "Plan B" para cada ocasión...para alegrarnos el día a bocados y pequeños tragos...

jueves, 25 de septiembre de 2014

#MoraimaCaiño: Echar la vista atrás, mirando hacia adelante

Logo de Moraima Caíño... Chulo!!!

El pasado jueves 18 de septiembre la que os escribe se trasladó al Pazo da Crega, en la localidad pontevedresa de Barro, para ser testigo, junto con otros amigos, compañeros y amantes del vino de la presentación de Moraima Caíño, el tinto elaborado con la variedad caíño de la Adega Moraima.
Esta cooperativa, nacida en 2006, cuenta en la actualidad con 11 socios y elaboraba, hasta la fecha, dos blancos: Aba de Trasumia y Moraima Albariño. Los dos blancos tampoco quisieron perderse la fiesta y formaron parte del evento para dar paso al plato fuerte: Moraima Caíño.


Pues bien, en una apuesta personal por poner en valor las variedades autóctonas de Rías Baixas, Moraima decidió elaborar un tinto 100% caíño, recuperando y cuidando con mimo las cepas viejas (prefiloxéricas en algún caso). A la labor y empeño de los socios ha de sumarse el trabajo llevado a cabo por la enóloga de la cooperativa, Cristina Yagüe, que comentó las notas de cata junto con Mercedes González.
Moraima Albariño y Moraima Caíño

También tuvimos la ocasión de probar la uva con la que se elabora este vino y así poder comprobar de primera mano las particularidades del caíño. Un vino "bravo" de entrada, que necesita que se le entienda, como vino atlántico que es, de forma  muy diferente a un vino elaborado en otras latitudes. Es por tanto un tinto de marcada acidez, en la que primero aparecen notas de frutas del bosque y toques balsámicos. Me llamaron poderosamente la atención los matices tostados e incluso avainillados una vez reposada la copa. En boca resulta amable, goloso, la acidez equilibrada y se adivina una buena evolución en botella... eso si sabemos esperar, porque sólo se han elaborado 2200 botellas de este Moraima Caíño. Expectante de ver esa evolución!

La fiesta se prolongó unas cuantas horas, en buena compañía, de buena gente y buenos vinos...al final de la noche el Caíño se cotizaba mucho... hasta había que buscarlo por debajo de las mesas!!!
Breve muestra de nuestro amor por el vino...

Sólo me queda darles la enhorabuena (y las gracias por invitarme) a los socios de la cooperativa por su apuesta por lo nuestro, por recuperar la tradición en la elaboración y recuperar las castas autóctonas, algo que en Galicia, los bodegueros sensibles, los que luchan por lo auténtico, están sabiendo apreciar desde hace algunos años ya. Larga vida al vino gallego!!!
Creo que esta foto es de Kike García Cerviño (Alacena Roja)...es la única buena, así que con tu permiso...

P.D. Os pido perdón por la calidad de las fotos, pero ese día mi móvil me comentó que no le apetecía trabajar y decidió sacar las fotos oscuras, así, como para dar ambiente... :(

1 comentario:

  1. Para velo evolucionar hai que mercalo e gardalo baixo chave ;)
    Grazas Lorena.

    ResponderEliminar

Tu opinión le da sentido a este blog; Vamos! No te cortes!!